Gracias Lidia

Acabo de leer, con un imperdonable retraso, el artículo  “La inaceptable Ley Trans”, que de forma insuperable ha escrito y publicado Lidia Falcón. Una vez más coincido en todo, no solo en parte, con las creencias feministas que se barajan en el mismo, por lo tanto, te felicito con calor por tus ideas y por la lucha en la que tantas veces hemos coincidido desde nuestra común ideología feminista.

El feminismo tiene eso, hermana a las unas y a las otras en lo esencial y refuerza nuestro interminable trabajo por alcanzar la igualdad.

Igualdad de derechos, igualdad basada en las capacidades de cada cual y, tú las tienes casi todas, por no decir todas, porque llegar al máximo es difícil y porque el feminismo respeta la disparidad de pensamiento, siempre que no ataque o esconda entre falacias la intención de mantenernos fuera del poder, que es lo que impone el patriarcado, definiendo mal la cultura de los pueblos.

En realidad, es lo que pretende hacer ahora con la teoría del queer, y otras cuestiones, para olvidar o borrar la diversidad sexual y nos lleva directamente a vivir en la inseguridad de cuál es el sexo de las unas y los otros o sencillamente si no existe ninguno.

En el fondo y en la forma, de lo que se trata es de devolvernos a la inexistencia, servimos solo para aquello  que quiera el todavía subsistente poder masculino. Entre tanto, las mujeres son asesinadas, impunemente, todos los días, y en multitud de ocasiones también los hijos e hijas comunes,  por aquel que mantiene el poder de hacerlo por que se cree dueño de nuestras  vidas  y las usa como mejor le place.

Ellos son quienes imponen la prostitución, son también los que utilizan a la mujer en la pornografía, regodeándose como si no tuviera más remedio que enseñar de esa forma a los jóvenes  a ser hombres, o cosificando a las mujeres para utilizar sus vientres al antojo de lo que en cada momento convenga.

En fin, mi empeño era hacerte llegar mi apoyo y la condena hacia quienes pretenden desvirtuar todo el trabajo que has hecho, dando un cumplimiento impecable a la ideología feminista, a través de tu capacidad para explicar que sin ella nunca podrá haber igualdad, porque la lucha exige la unión de las mujeres en compañía de aquellos hombres que excepcionalmente no comparten los mandatos del patriarcado.

Gracias por tu trabajo, gracias por tus esfuerzos, gracias por no amedrentarte ante los injustos castigos que siempre has recibido con valentía al defender el camino hacia la igualdad entre los seres humanos.

Fdo.: Ana Mª Pérez del Campo Noriega

Madrid, 26 febrero 2020