Un hombre mata a su mujer y luego se suicida en su casa en Madrid

Se trata de dos octogenarios que residían en el distrito madrileño de San Blas-Canillejas.

Un hombre de unos 80 años ha matado presuntamente a su mujer, de la misma edad, en una vivienda del distrito madrileño de San Blas-Canillejas, según las primeras pesquisas de la Policía Nacional, que trabaja con la hipótesis de que sea un caso de violencia machista. El ataque se habría producido con una escopeta de caza.

Fuentes de la Jefatura Superior de Policía han informado de que el suceso ha ocurrido sobre las 13:40 horas, cuando una vecina de la calle Hermanos García Noblejas de Madrid ha alertado de unos disparos en la casa de unos vecinos.

Los bomberos han abierto la puerta y han hallado los cadáveres de los dos octogenarios. La Policía trabaja con la hipótesis de que el hombre ha matado a la mujer y luego se ha suicidado.

Cuando los agentes han llegado a esta vivienda la puerta estaba cerrada, con la llave echada, por lo que los bomberos del Ayuntamiento han tenido que abrirla a la fuerza.

Los investigadores trabajan con la hipótesis de que el hombre, que estaba en un dormitorio junto a una escopeta de caza, ha matado a su mujer y luego se ha suicidado, aunque serán las autopsias y los datos recabados en la investigación los que lo determinarán.

Diez asesinadas en 2019

Un total de nueve mujeres han muerto por violencia de género en lo que va de año, como revela la última estadística oficial actualizada por el Ejecutivo a 15 de febrero, una cifra que se eleva a 10 con este nuevo caso. Además, existe otro caso en investigación en 2019 y, en lo que va de año, un total de 8 menores han quedado huérfanos por esta lacra.

Solo una de las nueve mujeres asesinadas a manos de sus parejas o exparejas que forman parte de la estadística oficial había denunciado a su agresor por malos tratos.

De las nueve mujeres asesinadas, siete de ellas mantenían una relación sentimental con su agresor y dos eran exparejas o estaban en fase de ruptura. Cinco de ellas convivían con su asesino y las otras cuatro, no.

Fuente: 20minutos